Los tiempos han cambiado y que las empresas o las relaciones de negocio no exigen con tanta vehemencia un look conservador; y en parte es cierto, las nuevas formas de ocupación no requieren más esa apariencia empresarial de los años 50, pero por más millennial que sea nuestro campo o lugar de desempeño, hay ciertos códigos de vestimenta a los cuales no se ha podido renunciar fácilmente.
- Saco
Puede ser un blazer que marque bien la figura y que no se vea anticuado, o una elección más formal que pueda conjugarse con unos excelentes jeans y zapatos altos. - Zapatillas de diferentes colores
Los tacones son el mejor complemento para un atuendo laboral; considera las actividades que vas a hacer y tu habilidad para caminar con ellos antes de elegir la altura, pero siempre ten varias opciones de diseño y color. Recuerda que los zapatos bajos te hacen perder presencia y estilo. - Vestidos
Ni muy cortos ni muy lagos; sólo ten en mente que debes sentirte cómoda y que un vestido siempre te hace lucir más segura y confiada en tu puesto. - Pantalones de vestir
Infortunadamente, los jeans no aplican para toda ocasión. Intenta buscar cortes modernos y telas relajadas para que no parezca que le robaste el pantalón escolar a un niño y todo estará bien. - Collares
Debemos dejar atrás los collares de cuentitas, plástico o piel. El tamaño no importa tanto, de hecho pueden ser muy grandes o muy sutiles, lo que de verdad pesa es el diseño. Hay que elegir aquellos de formas básicas, clásicas o geométricas para no errar. - Mascadas
De primera impresión puede ser incómodo y anticuado, pero sabiéndolas usar son una increíble alternativa para el cabello, el cuello o los bolsos. Si te cuesta trabajo, consigue un fular de colores neutros y arma diferentes looks con éste. - Joyas discretas
No tanto porque no puedas usar algo extrovertido e interesante, sino porque un reloj de formas sutiles o un anillo simple o con poca pedrería siempre son distintivos de clase y estilo. - Cárdigans y capas
Aunque hay suéteres increíbles, procura sólo usarlos con pantalones y jeans. Para cuando utilices un vestido o un look con falda, busca cárdigans y capas que mezclen un espíritu juvenil con una actitud profesional.