“CUÁNTAS COSAS PERDEMOS POR MIEDO A PERDER”

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Todos experimentamos esa sensación incómoda y desagradable que nos paraliza; un sentimiento que nos impide hacer lo que queremos hacer, mina nuestra confianza y nos impide avanzar en la vida. Esta emoción es el miedo.

El miedo es una emoción caracterizada por una intensa sensación desagradable provocada por la percepción de un peligro, real o supuesto, presente, futuro o incluso pasado. Es una emoción primaria que se deriva de la aversión natural al riesgo o la amenaza, y se manifiesta en todos los animales, lo que incluye al ser humano. La máxima expresión del miedo es el terror. Además el miedo está relacionado con la ansiedad.

  • Miedo a hablar en público
    Hablar en público es un gran desafío para la mayoría de la gente. A pesar de que algunas personas se preparan bien antes de hablar en público, la vista de la multitud delante de ellos los asusta. Tanto es así que la mayoría termina balbuceando en el escenario. La única forma de superar este tipo de miedo es practicar constantemente. Siempre recuerda que nadie es perfecto. Así que no importa lo bien que hablas inicialmente. Concéntrate en tu crecimiento como orador público.
  • Miedo a la muerte
    La mayoría de las personas temen a la muerte. La idea de que todo llegue a su fin un día los hace ansiosos y asustados. Sin embargo, la muerte es algo que no podemos detener. Es una parte integral y crucial del ciclo vital humano. La única manera de superar este miedo es aceptar las incertidumbres de la vida y vivir en el momento en vez de preocuparse por el futuro.
  • Miedo a la intimidad
    Todos amamos socializar con otros, pero el ser íntimo es algo que la mayoría de nosotros tememos. El temor de no ser lo suficientemente bueno para otro nos impide ser íntimos con ellos. La única manera de superar este miedo e tener confianza en tus habilidades y confiar en tu pareja si tienes una relación.
  • Miedo al fracaso
    Tendemos a ver el fracaso como una marca del fin de nuestra búsqueda y suponemos que no podemos hacer nada para arreglarlo. Este es un enfoque equivocado. En realidad, no importa cuánto fracasemos, sino cómo respondemos a nuestros fracasos en la vida. Al ser optimistas y persistentes, podemos superar el miedo al fracaso y convertirlo en un trampolín para el éxito.
  • Miedo al rechazo
    ¿Alguna vez estuviste interesado en solicitar un trabajo determinado, pero no lo hiciste? Fue el miedo al rechazo el que se hizo cargo. A menudo no reconocemos este tipo de miedo. Lo cual es lamentable porque nos impide incluso hacer un intento de perseguir nuestros sueños. Para superar este miedo, necesitamos recolectar valor y aceptar que incluso si somos rechazados varias veces, la vida no termina ahí, y debemos seguir intentándolo.
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