Un evento de pelos, de juegos, risas, y mucha alegría, así se vivió el Pool Party Dog en el Parque de la Familia, donde el único requisito fue asistir con su mascota.
Como en todas las fiestas, no podían faltar los invitados y a esta en especial, asistieron más de 150 perritos de todos tamaños, razas y colores; algunos muy educados y otros en verdad desenfadados, pero finalmente llenos de amor y cuidados.
Todos estos traviesos “peludos” se divirtieron de lo lindo en compañía de sus amos, pues el panorama era la gloria; con cielo despejado y una temperatura de 22 grados centígrados, las albercas que fueron improvisadas resultaron un verdadero agasajo para los peludos (bueno, no a todos les divirtió el agua), juegos para brincar y una especie de resbaladilla enjabonada, que logró motivar a todos los asistentes.
Hacer que las familias izcallenses tuvieran un rato de recreación y de diversión junto a sus mascotas, fue objetivo del director del Instituto Municipal de la Juventud (IMJUCI), Alejandro Hernández, quien dijo que por segunda ocasión se lleva a cabo la Pool Party Dog superando las expectativas. “Las mascotas se han convertido en parte fundamental de nuestra familia y por lo tanto, nos permite mantener una sana relación como vecinos izcallenses”.
Muchos ladridos, mucha gente y un ambiente de fiesta increíble; algunos peludos medio broncudos pero nada que un buen jalón de correa y una galletita para los más suertudos, pudiera controlar.