Un diagnóstico impactante y sorpresivo, que requiere de
toda tu fortaleza
Haz equipo con tu médico y apóyate en él siempre que lo necesites.
Si bien es cierto que una enfermedad como el cáncer genera miedo e incertidumbre, también es cierto que la ciencia ha avanzado mucho en los tratamientos y diagnóstico oportuno y cada vez son más las personas que se recuperan de esta enfermedad. Mantente positiva y proactiva.
Permíte que tu mente trabaje en tu favor y no en tu contra
Acepta y expresa todos tus sentimientos. Cada persona tiene su ritmo para asimilar y aceptar las noticias difíciles.
¿Cómo lo vas a hacer tú? Elige la forma en la que te sea más fácil expresar todo lo que sientes y lo que el diagnóstico te haga sentir. La ira, el temor o la tristeza son sentimientos totalmente normales. Pero no te los quedes, déjalos afuera, no permitas que sean tus compañeros en la travesía de lucha.
No estás sola. Seguramente tu familia y amigos están a tu lado para apoyarte en todo momento. Pero tú decides a quién se lo quieres contar. No es necesario que todo el mundo lo sepa, si es tu decisión y menos que finjas estar bien cuando no lo estás. Elige a una persona con la que puedas expresar tus alegrías y temores.
Controla tus pensamientos. Es normal que todo gire en torno a la enfermedad pero mantente ocupada con actividades que te ayuden a despejar la mente, relajarse y descansar de la rutina de la patología. A veces no es fácil desconectar de la enfermedad. Si lo consideras necesario no dudes en solicitar la ayuda de un especialista (psicólogo), que te guíe y ayude a afrontar la enfermedad.
Alíate con tu cuerpo
Con el cáncer, la vida de una persona puede sufrir muchos cambios, entre los tratamientos, las visitas al médico, etc.
No te aboques solamente a eso, mejora tu calidad de vida, conviértete en la cuidadora de tu cuerpo y verás que la respuesta es favorable
Haz ejercicio. Mantenerse activa y practicar algún deporte, es una de las formas más sencillas y efectivas de reducir el estrés al que se está enfrentando tu cuerpo. Consulta con tu médico alguno que sea recomendable y te guste.
Aliméntate bien. Es probable que enfrentes alteración en tu apetito. No te presiones, elige los alimentos que te gusten y te alimenten de forma correcta durante la enfermedad.
Duerme lo suficiente. Con el sueño el organismo se regenera y recupera la energía necesaria para luchar contra la enfermedad. Es recomendable establecer rutinas de sueño y dormir las horas suficientes.
Aprovecha tu tiempo libre. Tener cáncer no significa que no se pueda disfrutar de las cosas que nos gustan. Es importante no aislarte y estar cerca de las personas que quieres.
Sé participativa y no te quedes con dudas
Pregunta e investiga todo lo que no entiendas o te preocupe y participa de forma activa en la toma de decisiones de los tratamientos. Haz equipo con tu médico y apóyate en él siempre que lo necesites.