¿Te has propuesto adelgazar después de las vacaciones de Navidad?
Práctica un deporte exija un equilibrio entre cuerpo y mente para relajarte y olvidar la ansiedad.
A veces, ese intento de perder algunos kilitos se puede convertir en una situación muy estresante.
No te preocupes es normal, cuando dejamos de ingerir hidratos de carbono y azúcares en la cantidad que lo hacíamos antes de empezar la dieta, nuestro cerebro se encapricha con ciertos alimentos y por eso, la dieta nos causa ansiedad.
La serotonina es la clave
En situaciones de ansiedad, necesitamos alimentos que contengan triptófano, un aminoácido regulador de los niveles de la serotonina que, es la “hormona del placer y del humor.”
Es complicado que te sientas bien si los niveles de serotonina de tu cuerpo son bajos. ¿Y qué alimentos ricos en triptófano te van a ayudar a aumentar estos niveles? Los lácteos. Leche, queso, requesón y también los plátanos y los frutos secos contienen triptófano, por lo que es necesario que los añadas a tus comidas si sufres ansiedad. En el caso de los frutos secos, te recomendamos que consumas 4 o 5 nueces diarias en tus días más duros. Te aportarán magnesio y serán un apoyo imprescindible para superar la ansiedad que te provoque la dieta.
Los alimentos integrales
Los cereales tienen una gran capacidad para saciar nuestro apetito, te recomendamos que preguntes a tu médico si puedes incluir en tu dieta alimentos integrales.
Una buena opción es incluir en tu yogurt desnatado la fruta que desees y algún tipo de semillas como las de chía, por ejemplo.
Beber agua es imprescindible
Beber un vaso de agua diez minutos antes de la hora de comer te ayudará a llegar con menos ansia a la hora de la comida y ayudará a tu cuerpo a metabolizar las grasas que consumas en esa ingesta. Recuerda que cuanto más agua bebas, más fácil será para tu cuerpo expulsar todo aquello que le sobra.
Búsqueda del equilibrio
Es importante que apliques otros medios para evitar los momentos de ansiedad que pueden surgirte estando a dieta.No dejes de lado la práctica de deporte, para poder relajarte y olvidarte de la ansiedad además de mantenerte en forma.
Es el momento de que busques alguna clase de yoga o pilates o cualquier deporte que exija un equilibrio entre cuerpo y mente. Te enseñarán técnicas de relajación y de respiración que, sin duda, te ayudarán a controlar y librarte de la ansiedad.
Date algún capricho
Lo mejor que puedes hacer es dedicarte a esos pequeños vicios que no hacen daño a nadie y que mantendrán tu cabeza ocupada: puedes pasar el día de compras con tus amigas, dedicar una tarde a ponerte guapa en la peluquería, organizar planes con tu pareja, leer un buen libro durante horas o pasar un día en el campo.
Lo importante es que no te dejes vencer por la ansiedad, al ver los resultados de tu esfuerzo te será más sencillo dejar de sentirte ansiosa.