Las infecciones vaginales son más comunes de lo que crees, 3 de cada 4 mujeres las tienen alguna vez en la vida, pero a pesar de la cantidad de personas que llegan a padecerlas es un tema del que se habla poco y, por lo tanto, existen muchos mitos alrededor del mismo que pueden ser dañinos. Estos son algunos de ellos.
MITO: Las infecciones vaginales ocurren por falta de higiene
REALIDAD: Las infecciones vaginales ocurren por muchas causas distintas como embarazo, diabetes e incluso algunos antibióticos, así como el uso de productos de higiene como baños de burbujas o la ropa húmeda o ajustada.
Comúnmente aparecen cuando se produce un cambio en el equilibrio normal de las bacterias de la vagina, o un incremento en la producción del hongo candida. Aunque es importante mantener una buena higiene, rara vez es esta la causa principal de las infecciones vaginales de hecho, las duchas vaginales son una de las principales causas de las infecciones.
MITO: Las infecciones vaginales le dan solo a mujeres que son sexualmente activas
REALIDAD: Si bien es cierto que algunas infecciones vaginales ocurren en ocasiones cuando cambiamos de pareja sexual, también pueden aparecer en personas que no son sexualmente activas. Las levaduras (los hongos que causan la candidosis) crecen más con la humedad, así que hasta tu traje de baño mojado o la ropa interior que no es de algodón te pueden provocar una infección.
MITO: La vagina se debe lavar con jabón para que no huela mal
REALIDAD: Tu vagina realmente “se limpia sola”, y utilizar productos como jabones con fragancia o duchas vaginales puede alterar el balance de la misma. Sin embargo, la vulva sí es una parte del cuerpo que debemos limpiar. Puedes lavar los labios vaginales y la piel alrededor de la abertura de tu vagina con un jabón neutro o uno formulado especialmente para este propósito (y esto es más que suficiente).
MITO: Introducir un ajo en la vagina ayuda a curar infecciones vaginales
REALIDAD: NO. No existen estudios que avalen el uso de un diente de ajo para curar infecciones vaginales, y sí hay varios ginecólogos que han tenido que pasar un buen rato de sus días sacando pedacitos de ajo de las vaginas de mujeres que intentan este remedio. Los medicamentos para tratar las infecciones vaginales son seguros, efectivos y fáciles de conseguir. No arriesgues tu salud con remedios caseros.
MITO: Todo el flujo vaginal es provocado por una infección
REALIDAD: Las infecciones vaginales pueden producir un flujo verdoso o gris espeso con olor a pescado, o blanco que se ve un poco como queso cottage, y generalmente van acompañadas de picazón o irritación, pero existen otras razones por las que tu cuerpo puede estar produciendo más flujo de lo normal (como las pastillas anticonceptivas). Si sospechas que tienes una infección pero no estás segura, y es la primera vez que te pasa, consulta a tu ginecólogo para que te asesore.
Las infecciones vaginales generalmente son fáciles de tratar así es que, ¡no te preocupes! Sigue las indicaciones de tu médico y pronto desaparecerá.