El gobierno del Estado de México anunció la designación de 300 millones de pesos para atender la emergencia sanitaria por el Coronavirus (COVID-19), el cual, hasta el cierre de esta edición, suma diecisiete casos positivos; todos ellos relacionados a la importación, es decir, fueron pacientes que viajaron recientemente al extranjero.
Alfredo Del Mazo Maza, gobernador de la entidad, informó en conferencia de prensa que para la atención de los pacientes se habilitan seis hospitales, en Toluca: Centro Médico “Lic. Adolfo López Mateos”, Hospital para el Niño del Instituto Materno Infantil del Estado de México y el Centro Médico ISSEMyM.
Además, el Hospital Regional de Alta Especialidad de Zumpango, el Hospital de Alta Especialidad de Ixtapaluca, así como el Centro Médico ISSEMyM de Tlalnepantla.
“Se suspenden los eventos masivos, las actividades culturales y deportivas para evitar las multitudes que nos puedan llevar a elevar las posibilidades de contagio”, sostuvo Del Mazo Maza.
Los recursos deberán emplearse en medicamentos, insumos y equipamiento necesario para hacer frente al COVID-19, virus que ya fue declarado por la Organización Mundial de la Salud como pandemia mundial.
La Secretaría de Salud del Estado de México exhortó a la población a mantenerse informados por vías oficiales y a privilegiar las medidas básicas de higiene como el lavado constante de manos de manos con agua y jabón, cubrirse con el antebrazo la boca y nariz al estornudar o toser, además de limpiar y desinfectar espacios en el hogar y lugares de trabajo.
Suspensión de clases
Otra de las medidas que adoptó el gobierno estatal fue el suspender las clases en todos los niveles educativos en escuelas públicas de la entidad, luego de una reunión con autoridades de la Secretaría de Educación Pública federal (SEP).
La medida entra en vigor del 20 de marzo al 20 de abril, adelantando las vacaciones de semana santa. Sin embargo, el llamado a los ciudadanos es a realizar actividades únicamente para casos estrictamente necesarios y reforzar las medidas preventivas a fin de evitar contagios.
“En el Estado de México, en México, seguimos en la fase número 1, en donde las medidas que se deben de tomar son preventivas: higiene e identificación de posibles casos, realizar la prueba, y si un caso resulta positivo, se requiere aislar el caso e identificar los contactos que se tuvieron para poder evaluar sus condiciones de salud. Estamos en esa etapa, y es importante reiterarlo, estamos en la primera etapa, que es una etapa preventiva”, indicó.
De igual manera, Del Mazo Maza refirió tras reunirse con miembros del Consejo Estatal de Seguridad en Salud, que la Secretaría de Salud Estatal ha capacitado a 19 equipos para hacer pruebas que detecten esta enfermedad; las brigadas toman las muestras y posteriormente se analizan en el laboratorio de salud de la entidad, el cual está certificado por el sector salud federal.