Investigadores de la Universidad de Georgia, en Estados Unidos, inventaron una mochila para resolver los problemas de movilidad de las personas con discapacidad visual.
El dispositivo utiliza una cámara especial que cuenta con un procesador de inteligencia artificial y tecnología de procesamiento de imágenes, lo que permite detectar obstáculos y sobrellevar situaciones de la vida diaria como señales de tráfico, cruces peatonales y diferentes elevaciones.
La mochila se gestiona por medio de comandos de voz y busca ayudar a los más de 258 millones de habitantes en todo el mundo con dicho padecimiento, según datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS).
La unidad de procesamiento está dentro de la mochila, se requiere también utilizar un chaleco que tiene en su interior una cámara y una riñonera cuyo propósito es sostener una batería de bolsillo que proporciona un promedio de ocho horas de uso.