Por: Pilar González Reyes
La tarde de ayer todo #Izcalli estaba asombrado con la increíble imagen que nos regaló el cielo, sin embargo, no fue lo único insólito que ocurrió la tarde de este miércoles. Por ahí dicen que periodista sin suerte no es periodista, y ayer lo comprobé, yo sólo iba a chismear con mis amigas sobre cómo le negaron una foto a Selena Gómez en los Globos de Oro, quedamos de vernos en un restaurante muy famoso donde se puede tomar café por cuarenta y cinco pesos y desde donde se alcanza a ver el tan anhelado cuarto piso. Quedamos de vernos a las siete de la noche y, pensando que por primera vez llegarían temprano, entré buscándolas en nuestro gabinete habitual, pero me llevé una sorpresa que me dejó boquiabierta. No, no me las encontré a ellas, pero sí vi a seis suspirantes, que nunca vislumbré juntos, sentadas en una mesa platicando.
Gran parte de los personajes políticos de nuestro municipio se molestan porque, como medio de información se le abren las puertas a los distintos actores políticos y sociales, les causa escozor que se le publique a un personaje que no es de su equipo y pretenden forzar que los medios, periodistas y comunicadores se “definan” en favor de un actor o ideología. Lo curioso es que esos mismos personajes son los que terminaron en una mesa platicando y, seguramente, acordando de cara al proceso electoral del 2024, mientras se tomaban un cafecito para entrar en calor, alineaditos por el ex titular de donde pasa todo lo que importan los chinos.
Está de moda eso de andar trabajando en favor de la unidad, y eso no lo señalo, pues soy fiel creyente que mientras más limpio se lleve un proceso electoral, es mucho mejor para los ciudadanos, pues da oportunidad de enfocarse en las propuestas, capacidades e ideología de cada persona en vez de perder el tiempo en denostaciones y guerra sucia. Lo que llama mi atención es que en esa mesa se sentaron personas que entre ellos se hacían el feo y se volteaban los ojos. Entonces ¿convicción, conveniencia o jalón de orejas?
No sé en qué habrá terminado esa conversación, pues al final decidimos movernos para echarnos un chisme más interesante en otro café de Izcalli, pero espero que al final de esa reunión se lograran acuerdos para que construyan un proyecto juntos por el bien de Izcalli.
Hagamos algo, juguemos adivina quién ¿Quiénes creen que son estos seis personajes? Les dejo algunas pistas, son 3 mosqueteras y 3 mosqueteros, algunos morenistas desde el inicio, otros recién convertidos. A quien adivine, le vamos a regalar una comida en ese icónico restaurante.
Por cierto, anda el rumor entre los morenistas de que me inscribí para el proceso interno de su partido. Verdaderamente no sé a quién se le ocurrió reverenda locura, yo prefiero ver las cosas desde afuera, es mucho más divertido y menos estresante, así es que no se preocupen, “el Pilar de Izcalli”, no soy yo.