Toda la infraestructura vial de la ciudad requiere mantenimiento

Toda la infraestructura vial de la ciudad fue abandonada

El abandono de las vialidades por parte de la administración que encabezó Víctor Estrada Garibay no sólo se circunscribe al pavimento o al bacheo, resulta que el equipamiento vial también se ha deteriorado considerablemente.

En un breve recorrido realizado por Periódico de Izcalli a través de calles y avenidas de la ciudad, se pudo detectar que no sólo se trata de los baches que adornan a las diversas vialidades de Cuautitlán Izcalli, también los topes en el municipio se han convertido en un dolor de cabeza para miles de automovilistas.

La mayoría de los reductores de velocidad dentro del municipio se encuentran en malas condiciones, lo que provoca daños a los vehículos y riesgo de sufrir accidentes de tránsito, de igual forma, los que se encuentran en mejor estado no reciben el mantenimiento correspondiente.

A decir de algunos conductores, el deterioro que presentan los topes en el municipio ocasiona que muchas personas ni siquiera respeten estos señalamientos cuya situación, empeora cada día más.

Uno de los principales problemas de los topes en mal estado son las varillas que se encuentran volando, por lo que los automovilistas deben procurar no dañar las llantas de sus vehículos, así como la falta de pintura en estos señalamientos, lo que los hace completamente invisibles ante la visión y ocasiona múltiples accidentes de tránsito.

Los carriles confinados de la ciclovía, presentan abandono y en muchos lugares es tomada como zona de estacionamiento para subir pasaje por parte de los transportes de pasajeros, a pesar de que hay ciclistas que la siguen utilizando para transitar.

Agregue usted, los pasos peatonales en zonas escolares o cruceros de alta afluencia, que ya no son visibles para el automovilista, los semáforos que se descomponen, la falta de luminarias en zonas que por las noches se vuelven “Bocas de lobo”; los señalamientos de límite de velocidad, cruce de peatones y/o áreas restringidas para personas con discapacidad, entre otros, que la administración del medallista olímpico dejó de atender durante los últimos seis meses de su administración.

Es necesario que las autoridades presten atención a las carencias que enfrentan un sin número de vialidades, y que desgraciadamente les dejaron como herencia, pues es urgente que estas sean rehabilitadas para evitar accidentes, no sólo con trabajos de bacheo, sino con equipamiento adecuado a una ciudad moderna como lo es Cuautitlán Izcalli.

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