En el 2018 se robaron 78 mil 870 autos asegurados en el país, de los cuales, la autoridad solo logró la recuperación de 27 mil 759, es decir, el 35.2% del total. Por lo anterior y buscando frenar este tipo de delito, en el Congreso local del estado de México se analiza la posibilidad de reformar la ley para imponer de 5 a 20 años de prisión a quien vendan unidades robadas, aún y sin haber participado directamente en el ilícito.
La propuesta de reforma al Código Penal de la entidad, presentada por el Grupo Parlamentario del PRD, contempla elevar la condena si se trata de servidores públicos cuyas funciones sean de prevención, persecución, sanción del delito o ejecución de penas, aumentando el tiempo en prisión 10 años más y la inhabilitación de cinco a 20 años para desempeñar cualquier cargo público.
La Diputada Claudia González explicó que su propuesta busca hacer corresponsable al ciudadano de frenar la comercialización de unidades robadas, toda vez que, al comprar un automotor, no siempre verifican la documentación del mismo, lo que da oportunidad para el delincuente de seguir realizando estos actos.
El fenómeno del robo de autos se elevó en 16.6% en 2018, año en el que fueron robadas 78 mil 870 unidades, frente a las 67 mil 653 de 2017, de acuerdo a datos de la Asociación Mexicana de Instituciones de Seguros (AMIS).