Para salir satisfecho de tu entrevista de trabajo y dar una buena impresión, ten siempre en cuenta dos puntos clave: la preparación previa y la actitud durante la entrevista.
Cada puesto y cada empresa es diferente y siempre es importante prepararse antes de una entrevista para causar una buena impresión al reclutador y conseguir el trabajo.
Estudia tu currículum. Organiza los conceptos en tu cabeza para poder tener una conversación fluida sobre tu experiencia laboral y evitar repeticiones.
Analiza tus puntos débiles. Plantéate varios aspectos que puedan jugar en tu contra y prepara argumentos para defenderlos. Debes tener en cuenta que muchos entrevistadores buscan conocer tu nivel de inglés. Entonces lo mejor que puedes hacer es preparar una presentación de tu experiencia en inglés para que no te quedes en blanco.
No olvides cuidar tu apariencia. Viste correctamente el día de la entrevista, de acuerdo al tipo de empresa y su filosofía de trabajo.
Infórmate sobre la compañía. Al reclutador le interesará por qué quieres formar parte de su equipo. Debes conocer bien la empresa, cuál es su misión y visión, sus productos y/o actividades.
Sé puntual. Intenta llegar a la entrevista con 5 o 10 minutos de antelación.
No te puedes distraer. Saluda de una forma convencional, siéntate con la espalda recta y una postura relajada, y evita apoyarte con los codos en la mesa.
Evita gestos de inseguridad o nerviosismo. El entrevistador quiere reclutar a una persona segura de sí misma. No te muerdas las uñas
Piensa antes de hablar. Es esencial estructurar y pensar todo aquello que queramos transmitir, de lo contrario el discurso no será fluido ni entendible.
Haz preguntas. El reclutador valorará que hagas preguntas, es una manera de mostrar interés en el trabajo, siempre y cuando sean relevantes.
Desde el primer minuto, el entrevistador te estará analizando, observará tu relación con él y tu lenguaje corporal.
Por eso, cuida que tu actitud sea la correcta desde el mismo momento en que entres por esa puerta.
Lleva una copia de tu currículum impresa para entregársela al reclutador sin importar que ya lo haya leído, es mejor facilitarle la información.