
Hace algunos años, al profesor en psicología Cliff Arnall, se le ocurrió la fórmula para conocer cuál es el día más triste del año y a pesar de haber iniciado como una teoría, la cual ha sido acusada por diferentes expertos de tener tintes de falsedad pseudocientífica además de parecer estrategia publicitaria de una compañía de viajes ya desaparecida, Sky Travel, esta se ha popularizado en el mundo.
Las bajas temperaturas, la presión por las deudas navideñas, no haber cobrado el mes de enero, el frío, el tiempo que ha pasado desde las fiestas navideñas, la desmotivación y los propósitos de año nuevo incumplidos, así como factores depresivos estacionales de cada país o cada grupo determinado, son los parámetros que tomó en cuenta para su ley.
En ella, consideró que el tercer lunes de cada año es el más triste del año. Sin embargo, varios especialistas más han emprendido una campaña llamada #StopBlueMonday bajo la premisa de que no existen argumentos científicos sólidos, ya que el estado de ánimo de las personas no se constituye de eventos únicos.
“Los resultados dejan en claro que no hay evidencia concluyente de que en este día ocurra algo fuera de lo común”, señaló Ricardo Trujillo Correa, especialista de la UNAM.