El desorden se vincula con tus miedos más profundos
Ocultas o acumulas objetos debajo de los muebles, seguramente le das mucha importancia a la opinión de los demás.
Si eres de las que se distingue por mantener los objetos en desorden, debes saber que según sus características, cada desorden tiene un sentido y dice mucho sobre ti. Se piensa que la relación que mantenemos con los objetos y los espacios que habitamos implican cierta traducción de nuestro mundo interior.
El desorden suele vincularse con nuestros miedos más profundos: miedo a los cambios, al olvido, a la carencia. Al igual que, según la zona en que se acumulen los objetos, tiene un significado diferente.
Aprende cómo entender la manera en que debes habitar los espacios, y liberarlos de cualquier obstáculo que puedas estar interponiendo al flujo de energía.
Sala de estar
La sala de estar es un espacio para compartir con otras personas, es lo que muestras primero cuando invitas a alguien a tu hogar.
Quienes mantienen su sala de estar desordenada o con objetos amontonados en los rincones, manifiestan un profundo temor a ser continuamente rechazadas.
Espacio de trabajo
Si tu escritorio o espacio de trabajo suele estar desordenado o sucio, revela miedos, frustraciones y falta de control respecto de las situaciones y decisiones que tengas por delante.
Puerta de entrada y pasillos
Los lugares de tránsito como las puertas y los pasillos son puntos clave que se refieren a nuestra relación con los demás.
Si acumulas objetos o están desordenados en la zona de entrada a tu hogar, sientes un profundo temor a relacionarte con otros. Del mismo modo, si amontonas cosas detrás de las puertas seguramente sientes miedo a ser rechazado.
Si eres desordenado en los pasillos de tu hogar, tienes temor a expresar libremente lo que piensas y deseas. La comunicación será un área central a trabajar para tí.
Cocina
Descuidar el espacio donde se preparan los alimentos, significa resentimiento y fragilidad emocional, ya que es el área donde trabajas con la nutrición, que hace que el cuerpo y la mente funcionen en armonía.
Desorden irregular
El desorden irregular en toda la casa, con ropa u objetos tirados en cualquier parte, significa ira contenida y que la vida despierta apatía y desinterés.
Cajones y armarios
Si los cajones y armarios de tu hogar suelen estar desordenados, posiblemente tengas dificultades para controlar tus emociones y sentimientos más profundos.
Mesa del comedor
Si acumulas demasiados objetos y pertenencias sobre la mesa del comedor, seguramente estés manifestando una sensación de exceso de control por parte de tu familia.
Debajo de los muebles
Ocultas o acumulas objetos debajo de los muebles, como la cama, seguramente le das mucha importancia a la opinión de los demás. Si quieres cambiar este hábito, puedes comenzar por restarle importancia a lo que piensen de ti.
También puede funcionar inversamente: si te propones quitar ese desorden de abajo de la cama, puede que te ayude a ordenarte también por dentro y comenzar a despreocuparte por las miradas ajenas.
Lo mismo puedes hacer con el desorden de todas las partes de la casa. Como dice un viejo dicho popular, ordena por fuera para ordenarte por dentro. Cuando estás trabado con un miedo o con un aspecto que no te gusta de tu personalidad, y no puedes modificarlo, puede ser útil comenzar ordenando la parte de la casa que lo representa.
Consejos para tener orden
Según el sistema filosófico oriental Feng Shui, un lugar limpio y ordenado favorece el flujo de energía positivas.
Mantener los sitios que habitas en un relativo orden no tiene por qué ser una tarea tediosa y extensa. Aquí tienes algunos sencillos consejos que podrían ayudarte:
– Clasifica los objetos y destínales un sitio regular funcional a su utilidad.
– Haz lugar a lo nuevo. Obsequia los objetos que ya no utilices y desecha los que no tengan posibilidad de repararse.
– Mantén limpias las superficies y ventanas. Si lo haces regularmente, no tendrás mayor trabajo luego.
– Aromatiza tu ambiente de manera natural con fragancias frescas.
– Recoge lo que esté en el suelo y ordénalo en un cesto hasta que puedas ponerlo en un sitio adecuado.
– Despeja los espacios. Aprovecha y maximiza cada rincón dejando libre los lugares de circulación.
– Vacía los cestos de basura con regularidad. Recuerda que un entorno ordenado te ayudará a estar en calma contigo mismo y a encarar cada día de una manera diferente.